Si este verano solo pudieras hacer una cosa: para.

Para de correr, de acumular, de llenar cada minuto con cosas que hacer. Porque a veces, el mayor lujo no es viajar lejos, sino bajar el ritmo. Respirar. Sentir. Conectar.

En ARTIEM creemos que el verano no va de checklists, sino de momentos que se saborean despacio. Por eso, te proponemos vivirlo poc a poc, con experiencias sencillas que lo cambian todo: un desayuno sin prisa, una tarde sin plan, una noche que acaba en concierto o cine bajo las estrellas.

 

Empieza bien el día: un desayuno con alma (y con sabor)

Hay un placer especial en despertarte sin despertador. Dejar que la luz natural te acaricie. Salir a la terraza y tomarte tu primer café sin mirar el reloj. En nuestros hoteles, el desayuno es más que una comida: es un ritual. Con productos de kilómetro cero, fruta fresca, pan recién hecho y zumos naturales.

Ya sea frente al mar o en el corazón de la ciudad, las mañanas en ARTIEM invitan a empezar bien el día. Desde dentro.

 

Moverte o parar: tú decides

Cada cuerpo tiene su ritmo. Algunos prefieren empezar con una sesión de yoga al aire libre o un paseo por la naturaleza. Otros aprovechan ocasiones únicas, como el evento especial del sábado 19 de julio en ARTIEM Carlos: una sesión de entrenamiento suave con vistas al puerto de Maó, seguida de un brunch delicioso. 

Y si tu cuerpo solo te pide parar, estás en el lugar perfecto: sumérgete en el spa de ARTIEM Asturias, déjate envolver por el Sea Wellness  en el puerto de Maó o disfruta de un masaje con aroma a calma en Cala Galdana. Aquí, cuidarse también es dejarse cuidar.

Además, con el Day Pass de ARTIEM Asturias puedes venir solo a desconectar un día, sin necesidad de alojarte. A veces, un solo día bien vivido cambia toda una semana.

 

Comer bien, sin prisa

En verano todo sabe mejor. Más aún si se disfruta al aire libre, con productos frescos y de proximidad. Las propuestas gastronómicas de ARTIEM están pensadas para hacerte sentir bien por dentro y por fuera: platos ligeros, sabrosos, llenos de color… y de intención.

Puedes comer en nuestro jardín, en nuestros restaurantes o frente al mar, acompañado de un vino local o un cóctel bien preparado. Porque comer también es celebrar.

 

Deja que la tarde fluya

Las tardes de verano no entienden de horarios. Puedes leer, echarte una siesta, salir a explorar o simplemente no hacer nada. Tal vez prefieras sumarte a una experiencia wellness, desconectar en una de nuestras camas balinesas o dejar que el tiempo pase sin más.

Y cuando el sol empieza a caer… empieza la magia.

 

Noche de verano, noche especial

Las noches en ARTIEM tienen un ritmo propio. A veces es el sonido suave de una guitarra en directo durante la cena. Otras, una película al aire libre bajo las estrellas, como en nuestro cine a la fresca en Asturias.

Y algunas noches brillan con luz propia, como los eventos de luna llena en ARTIEM Audax en Cala Galdana, que combinan gastronomía, música y naturaleza en una experiencia sensorial inolvidable.

En nuestras terrazas, cada noche se celebra como si fuera única. Y lo es.

 

Dormir profundo, despertar ligero

Después de un día vivido poc a poc, el descanso es real. Camas que abrazan, silencio natural, y la sensación de que no hay prisa por despertar. Dormir no es solo cerrar los ojos: es recuperar el equilibrio, el cuerpo y la calma.

 

Este verano, elige vivirlo distinto

No necesitas correr, ni irte lejos, ni tenerlo todo planeado. Solo necesitas parar. Respirar. Elegir momentos que te hagan bien.

Tu felicidad te espera aquí.
El verano que recordarás no será el más intenso, sino el que viviste a tu ritmo.
Y ese, empieza cuando lo vives poc a poc.